Bienvenido/a
En una canción de Elvis Presley, la Luna Azul es un símbolo de soledad; cuando el amor conquista todo, la Luna Azul se torna dorada.
La Luna es Azul para quien defiende una causa perdida.
En el idioma inglés, Luna Azul -o Luna Triste- refleja la idea de tristeza, añoranza y melancolía.
La Luna es Azul, cuando la luna llena se produce dos veces en un mismo mes, en el instante exacto en el que la alineación Sol-Tierra-Luna es máxima.
viernes, 4 de diciembre de 2009
BÉSAME MUCHO
Bésame,
y despliega un arco iris en mi boca.
Bésame,
y beberé de un sorbo la vida.
Bésame,
en los sótanos del crepúsculo.
Bésame,
en las buhardillas del alba.
Bésame,
como rocío en las rosas.
Bésame,
como aire en la sierra nevada.
Bésame,
con la fuerza de los mares
Bésame,
con la quietud de una noche estrellada.
Ríen tus labios
entre los míos,
y su sabor me vuelve loca.
M.M.D. Diciembre '09
miércoles, 2 de diciembre de 2009
ESAS COSAS QUE AMO
Recorreré la ruta
donde el canto se hace dicha
y la luna se confunde con
el inaugural níveo manto.
En la noche volverá
a crujir la nieve
bajo las ruedas de un auto,
mientras mis ojos vaguean
por tu preciado contorno.
Mis manos desnudas
jugarán como niñas
con el frío polvo blanco,
para luego buscar,
maliciosas, el deleite
de tu suave piel quemando.
Recorreré la ruta,
silenciosa y nocturna,
donde murió mi caos,
allá donde mas te asemejas
a esas cosas que amo.
M.M.D Diciembre '09
domingo, 15 de noviembre de 2009
ES AZUL LA TINTA ROJA
olvida el pasado absurdo,
no sigas pensando en él.
Toma el camino tuyo
Solo mira de reojo,
el tiempo sigue a lo suyo.
Rompe el ciclo de Babel,
rie, canta con orgullo
a tu albedrío y tu antojo,
tinta roja en el papel.
C.Santaignorancia
En qué momento el rojo
se disipó y mutó
en azul de trazo grueso,
cuando pasó digo yo.
Acaso el sístole y diástole
no marcaban el mismo son,
dictó de forma distinta
el alma al corazón.
Con tinta roja indeleble,
del corazón al cartón,
versos del color del alma,
ocultos a la razón;
versos como la misma vida,
sabor tinto bermellón.
Trazos con el mismo flujo
que sientes tu y siento yo,
escritos en las paredes del alma
y del alma al corazón.
¿Ves tu azul la tinta roja
O solo la veo yo?
M.M.D Noviembre 09
viernes, 13 de noviembre de 2009
SUS MANOS
ungiendo
abrazos.
Nada perturba la calma.
Caminos de piel
aprenden,
rincones de placer
logran.
Ojos son en la noche,
susurros de madrugada.
M.M.D Noviembre 09
de la mano y de la piel, trabados,
sus cuerpecitos amarrados,
entre las sábanas alardean
de tanto amor, enamorados,
de tanto deseo, desesperan.
A mirar sus cuerpos, a ver.
A tocar y saber, a que saben.
A sentirse y a sentir se atreven,
sin intención y sin querer,
rompen fronteras de satén.
Vibra la vida y arde la piel.
Como niños, a quererse juegan
con los dedos paseando su locura
de la noche al día sin premura,
sueñan que a la luna suban,
miércoles, 11 de noviembre de 2009
TE QUIERO Y PUNTO PELOTA
las mas simples cosas.
Te quiero por como en bajito,
me dices que me amas.
Te quiero cuando a la hora precisa del deseo,
me inventas y te reinventas.
Te quiero cuando a la hora pronta del alba,
te mueres acariciando mi marcha.
Te quiero donde comienzan tus besos,
y donde acaba tu alma.
Te quiero donde tu olor me posee,
y tu sabor me transforma.
Te quiero por lo que eres,
y por lo que no eres.
Te quiero por lo que hablas,
y por lo que callas.
Te quiero,
por qué te quiero.
Te quiero….
y punto pelota.
M.M.D Noviembre 09
jueves, 22 de octubre de 2009
UN LUNES QUE NO LO FUE con la Orquesta Reciclando
Lunes 19 de octubre, 21:30 horas.
Lugar: Teatro Lope de Vega.
Parecía que no ibamos a llegar nunca, todo eran vallas, obras, desvíos, atascos y mas obras...(nuestro alcalde y su macromania de levantar todo adoquin que ve); con la lengua afuera despues de subir todo Alcalá a la carrera logramos llegar a Callao.
Butacas: 3, 5 y 7...es una manía, pero siempre que puedo esos números estan presentes en todo. Ante la disyuntiva de mi hija o yo en la 5 (el número mágico de ambas) sentamos a Raquel en el medio y la flanqueamos, orgullosas de su presencia entre nosotras. Fue buena la decisión, Raquel tiene la cualidad de unificar criterios, siempre conciliadora y en este caso como pez en el agua. Sorprendente Raquel, no hay letra de canción que ella no sepa.
Anduvimos comedidas al principio...pero no aguantabamos el picor del culo en el asiento. ¿como se puede estar ante tan estupenda orquesta sin bailar? Al segundo tema ya estábamos de pie, cantando, bailando y gozando, con todo el cuerpo, el concierto.
Estupendo concierto, geniales músicos. A destacar el saxo...(siento debilidad por los saxos negros y para mas inri, cubanos) no he visto músico que exprese mejor cada corchea brotando por cada poro de su piel...
Todas los mejores temas, uno tras otro, reversionados como solo Pau Donés podría hacerlo...
Con cada uno de ellos reviviendo un recuerdo...el que mas me emocionó, como era de esperar:
Hace días que te observo,
he contado con los dedos,
cuantas veces te has reído, u
na mano me ha valido.
Hace días días que me fijo,
no se que guardas ahí dentro,
a juzgar por lo que veo,
nada bueno, nada bueno.
De que tienes miedo,
a reír y a llorar luego,
a romper el hielo,
que recubre tu silencio.
¡Suéltate ya! y cuéntame
que aquí estamos para eso,
'pa' lo bueno y 'pa' lo malo,
llora ahora y ríe luego.
Si salgo corriendo,
tu me agarras por el cuello,
y si no te escucho, Grita!
Te tiendo la mano,
tu agarra todo el brazo,
y si quieres mas pues, Grita!.
Hace tiempo alguien me dijo,
cual era el mejor remedio,c
uando sin motivo alguno,
se te iba el mundo al suelo,
y si quieres yo te explico
en que consiste el misterio,
que no hay cielo, mar, ni tierra
que la vida es un sueño.
___________________________________________________
martes, 6 de octubre de 2009
PEQUEÑECES
con el trino de los pájaros.
Miro el lento respirar
de tu pecho sin mis labios.
Comparo con las tuyas
la pequeñez de mis manos,
y me muero por tocarte
-de nuevo-
de los pies a los costados;
y encender y desbordar
ese volcán germinado.
Miro el lento respirar
de tu pecho sin mis labios.
Me pregunto que sería
lo que hacia mi te atrajo,
fue la luz de mi mirada,
el sonreír de mis labios,
el perlear de mis dientes,
fue mi cuerpo inexplorado.
El día se despereza,
trinan alegres los pájaros.
Un coche calle arriba se aleja.
Tu pecho sin mis labios.
M.M.D Octubre 09
lunes, 5 de octubre de 2009
GRACIAS A LA VIDA...GRACIAS MERCEDES SOSA
MERCEDES SOSA LLENO NUESTROS CORAZONES DE ALMA, CORAZON Y VIDA...Nadie como ella hizo vibrar cada fibra de nuestro cuerpo, cada poro de nuestra piel, cada latido de nuestro corazon...
BUEN VIAJE DAMA NEGRA!!!!
Gracias a la vida que me ha dado tanto
me dio dos luceros que cuando los abro
perfecto distingo lo negro del blanco
y en el alto cielo su fondo estrellado
y en las multitudes el hombre que yo amo.
Gracias a la vida que me ha dado tanto
me ha dado el sonido y el abedecedario
con él las palabras que pienso y declaro
madre amigo hermano y luz alumbrando,
la ruta del alma del que estoy amando.
Gracias a la vida que me ha dado tanto
me ha dado la marcha de mis pies cansados
con ellos anduve ciudades y charcos,
playas y desiertos montañas y llanos
y la casa tuya, tu calle y tu patio.
Gracias a la vida que me ha dado tanto
me dio el corazón que agita su marco
cuando miro el fruto del cerebro humano,
cuando miro al bueno tan lejos del malo,
cuando miro al fondo de tus ojos claros.
Gracias a la vida que me ha dado tanto
me ha dado la risa y me ha dado el llanto,
así yo distingo dicha de quebranto
los dos materiales que forman mi canto
y el canto de ustedes que es el mismo canto
y el canto de todos que es mi propio canto.
Gracias a la vida
Gracias a la vida
Gracias a la vida
Gracias a la vida.
___________________________________________________
viernes, 18 de septiembre de 2009
Noche sin luna
Sería el vino de oporto que empezaba a surtir sus efectos o el calor que desprendían las llamas bailarinas de la chimenea, pero tendida desnuda sobre la alfombra de reno notaba como su piel se atemperaba y ya no tenía frío.
Todos sus sentidos alerta en comunión directa con su imaginación. Podía imaginar perfectamente la escena sin valerse de sus ojos. Las paredes anaranjadas por el efecto de las llamas dibujaban sombras en la sala que contrastaban con la oscuridad de un noche sin luna. Olía a tierra mojada y a madera, en la proporción acertada para envolver su cuerpo, como si de un preciado regalo se tratase, de un aroma arrebatadoramente ancestral y terreno.
Extendió cautelosa su mano derecha en un intento de alcanzar la copa de vino que minutos antes había dejado sobre las frías baldosas. Comprobó, en el lento caminar de sus dedos, la suavidad de la piel de reno acariciando la parte interna de sus antebrazos. Un leve escalofrío le recorrió la columna de arriba abajo. El crepitar del fuego le devolvió la calidez anterior y avivó su percepción auditiva que, intuitivamente, se orientó hacia el otro lado de la sala. Más allá, en la cocina sonó la puerta del frigorífico al cerrarse y el tintinar del cajón de los cubiertos. Trató de adivinar que se fraguaba allí cuando la yema de su dedo corazón rozó el pie del frío cristal de la copa de vino, desbaratando así sus pensamientos e incitando otros sentidos. Tomó suavemente la copa de vino en su mano, a la vez que cimbraba ágilmente su cuerpo en un movimiento grácil y ballístico. Apoyó su mano izquierda en la alfombra y mojó sus labios con la fresca acidez del caldo, apreció su sabor frutal, su textura aterciopelada, su estimulante sensación de calidez del final. Cerró los ojos reafirmándose en su cata y volvió a degustar un sorbo más largo. La punta de su lengua recorrió los labios atesorando los últimos restos del excelente líquido.
Satisfecha, se dejó deslizar plácidamente a su posición primera, apartando la copa a una distancia prudente para no ser derramada involuntariamente. Abrió los ojos y no vio nada. Sonriendo recordó el pañuelo de seda negro que los cubría y los pormenores que le llevaron allí. Sintió un calor excesivo en su costado cercano a la chimenea; rodó, alejándose de ella, hasta quedar tendida de cara. En el tránsito reaparecieron aromas antes inadvertidos: la fragancia del gel de ducha combinada con el peculiar olor a cuero de la alfombra, el perfume impregnado en el pañuelo con el suavizante del pelo…
El sonido de unos pasos descalzos, interrumpió la disquisición de esencias. Un cambio de luz a través del pañuelo reveló una presencia inmediata. Adivinando una mirada clavada sobre su cuerpo, sintió el rubor de su desnudez y volvió a rodar hasta mostrar su espalda.
Los pasos se dirigieron hacia el equipo de música. Al momento, sonaron suaves los primeros acordes del “Otoño” de Vivaldi. La atmósfera se impregnó de notas de complicidad. Una profunda exhalación relajó por completo el cuerpo tendido. Los sentidos bajaron la guardia. Podía esperar todo y nada, pero prefirió no augurar. En esto se debatían sus pensamientos cuando advirtió la cercanía de otro cuerpo arrodillado a su lado. El inconfundible olor a limón provocó una nueva exhalación. No quería dar rienda suelta a la imaginación y en ello centró su pensamiento. La calidez de sus labios sobre la base del cuello inició ceremonioso el rito sensual. Su respiración estableció el ritmo, aún acorde con el tempo de adagio que se oía. Con su maestría ya familiar, sus dedos danzaron caprichosos por la espalda que se iluminó como una inmensa Vía Láctea. Parecían templar una guitarra, y como tal vibraron las cuerdas-costillas, los poros-montañas, el vello-junco…La respiración se hizo más y más profunda. Parecía flotar sobre nubes de algodón. Cientos de labios dejaron sutil estela de espuma de mar.
De pronto, todo cesó. Tan solo el crepitar del fuego rompía el silencio. Fueron largos segundos agudizando los sentidos. Ninguna percepción salvo el ritmo acelerado de ambas respiraciones.
Se escuchó el encender de un mechero y al punto la esencia vainillada de una vela. Un estremecimiento emocionó cada centímetro de su piel. La maquinaria de la imaginación se puso en marcha. La temperatura corporal ascendió por segundos predisponiéndose para…Algo metálico y frío hizo temblar cada fibra a su paso por la espina dorsal. No podía pensar, lo sensitivo dominaba todo. Se dejó llevar emitiendo un callado gemido. El filo del objeto subía por sus costados, bajando por su columna en un incesante y lento circuito en ocho. El tamborileo de unos dedos borró, de arriba abajo, todo lo anteriormente trazado. Una sustancia gélida y densa paralizó la tercera cervical, tensando todos los músculos y piel de su alrededor. El ardor del cuerpo se fusionó con el nuevo elemento licuándolo y derritiendo su jugo espalda abajo. Sintió el discurrir de su trazado lento y cadencioso, vértebra a vértebra, se bifurcó al llegar a la altura de las caderas. Y allí fue recorrido a la inversa por una ardiente y húmeda lengua que excitó hasta el centro todo su ser. Sintió el palpitar de los sexos, la aceleración de los pulsos, el tensar de los cuerpos.
Súbitamente su cuerpo fue manejablemente volteado hasta quedar de cara, flanqueada por dos fuertes piernas, hizo el ademán de desprender el pañuelo que la cegaba. Sus manos fueron apartadas por dos más varoniles que la clavaron en cruz al suelo al tiempo que su boca fue sellada por un pasional e intenso beso. El aflojamiento hizo mella y de nuevo se hundió en el suspenso. Dientes exprimiendo sus pezones. Labios agitando las mareas. Ceras solidificándose en la piel. Mezcolanza de fluidos…..
Como sonrió la luna a través de los cristales, cuando la petit morte fundió al unísono dos cuerpos bañados en el brillo anaranjado de las llamas.
viernes, 28 de agosto de 2009
NO, NO LAMENTO NADA
He creído necesario rendir mi pequeño homenaje a esta
gran dama, que le robó la voz a un ruiseñor y que hoy se hace,
con "Non, je ne regrette rien", completamente significante en mi vida.
Gracias Edith Piaf.
No! nada de nada,
No! no lamento nada
Ni el bien que me han hecho,
Ni el mal,
Todo eso me da igual!
No! nada de nada,
No! no lamento nada.
Está pagado, barrido, olvidado...
Me importa un bledo el pasado!
Con mis recuerdos
He encendido el fuego,
Mis penas, mis placeres…
Ya no los necesito!
Barridos los amores
Y todos sus temblores,
Barridos para siempre,
Vuelvo a empezar de cero.
No! nada de nada,
No! no lamento nada.
Ni el bien que me han hecho,
Ni el mal,
Todo eso me da igual!
No! nada de nada,
No! no lamento nada.
Porque mi vida,
Porque mis alegrías,
Hoy comienzan contigo... !
http://www.youtube.com/watch?v=gALRkzB530A
___________________________________________________
jueves, 27 de agosto de 2009
Adagio de la Sonata en Sol Menor de Telemann
Video grabado en la Escuela de Musica de Tres Cantos durante el ensayo del Adagio de la Sonata en Sol Menor de Telemann. Tras el curso de Música Barroca impartido por la clavicembalista: Inés Fernández Arias (Laura Casanova) en 2007.
___________________________________________________
MUERDE
Texto: Mario Benedetti
Fotografia: Irene Marcos
Muerde
la gota de sudor
que surca el océano de mi espalda.
Me corté el pelo a lo garçon
para que nada estorbara
la danza de tus etéreos dedos
escribiendo mil palabras,
el lento navegar de tus labios
que en maremotos se desatan.
Muerde
la gota de sudor
como si de tus labios se tratara.
Muerde
el péndulo del reloj
que el sueño descompasa.
Solo los dos sabemos
lo que a todos se le escapa.
Cómo ansía la profundidad
la caricia de tu áncora.
Gime inagotable la humedad,
se elevan diminutas montañas,
todo se estremece y tiembla.
Muerde
el péndulo del reloj
como si de tu ancla se tratara.
Muerde
la gota de tus labios
al pendular en el medio el ancla;
en esta noche de párpados regañados
todo me muerde un poco,
un poco todo me mata.
M.M.D Agosto 09
domingo, 21 de junio de 2009
SINFONIA NOCTURNA
"Eternamente has de sentir el influjo de mi beso. Hermosa serás a mi manera. Querrás lo que quiera yo y lo que me quiera a mí: al agua, a las nubes, al silencio y a la noche; al mar inmenso y verde; al agua informe y multiforme; al lugar en que no estés; al amante que no conozcas; a las flores monstruosas; a los perfumes que hacen delirar; a los gatos que se desmayan sobre los pianos y gimen como mujeres, con voz ronca y suave.
Charles Baudelaire
A dos mil metros de altura,
fui paisaje.
Cada átomo de mi cuerpo
titilando al mismo son
que las miles de luces de lava
a mis pies.
Mi respiración y la tuya:
una corchea en anacrusa
de esa bestial
Y la coda:
la luna
reflejada en un rio de aguas violetas,
la sonrisa
de unos ojos que aman al mirar,
la inmensidad
de unas manos que besan cuando acarician.
Anoche
a dos mil metros de altura,
fui paisaje.
M.M.D Junio 09
jueves, 28 de mayo de 2009
VUELVO
Aun desgarrada pero una.
Con el luto que me callo
y la mirada que conversa,
con la certeza de lo andado
y la esperanza de lo que resta,
Vuelvo
Vuelvo y encuentro
el espejo
donde mirarme
sin fruncir el ceño,
la palabra
que relata esa caricia
que, de un solo golpe,
exorciza mi desconfianza.
Vuelvo.
Vuelvo y te encuentro.
Moon
lunes, 13 de abril de 2009
SUEÑA CONMIGO
La oscura corriente del hastío
me arrastró a esta orilla.
Solo quise perderme,
alejarme para siempre,
dormir para no despertar.
Y encontré este lugar,
donde sueño y realidad
se enredan y truecan;
donde
las horas tienen sentido;
donde
es posible regalar una luna llena;
donde
los ojos hablan sin palabras,
las manos besan sin labios,
las bocas acarician sin huellas.
Existe ese lugar;
habla, besa, acaricia;
sueña conmigo.
Moon
miércoles, 25 de marzo de 2009
DE SOL, ESPIGA Y DESEO
La arena estaba caliente después de capturar todo el día los rayos del sol. Jugó con ella entre sus dedos antes de colocarse sus cascos y tender todo su cuerpo en un ansia de fundirse con el elemento.
Estaba absorto en un ejercicio de percepción sensorial cuando fue inesperadamente sorprendido por el vuelo raso de una cometa. Lo siento, señor –se disculpó un azorado chavalín, que salió corriendo hacia la orilla tras recoger aparatosamente sus trastos.
El chico de ojos pardos le siguió con la mirada. Una sonrisa afectuosa se insinuó en su cara. Algo llamó su atención. A lo lejos distinguió una chica que avanzaba por la orilla. ¿Qué esta haciendo? –se preguntó. Observó, durante un instante, a tenerla mas próxima. Su pelo suelto brillaba como las espigas al sol, una camisola blanca casi transparente era su único vestido, sus pies descalzos se hundían en la arena. Parecía buscar algo despreocupadamente y cuando lo tenía en sus manos lo arrojaba al mar con un movimiento ballístico. A veces se entretenía observándolo o apreciando su textura y de nuevo lo lanzaba lejos al agua.
¿Y ahora que hace? …. Se estaba soltando un colgante que, por los reflejos que destellaban en él los rayos de sol, parecía un cristal o algo similar. Ceremoniosamente, como siguiendo un ritual iniciático, se adentró poco a poco en el mar. No quería mojar el bajo de su camisola y andaba con precaución dibujando una estela tras de si. El sol declinaba sus últimos rayos y preparaban el escenario a una previsible e imponente luna llena. Alzó el cristal hacia el horizonte y sujetándolo por el cordel enrollado entre sus dedos, se inclinó grácil hacia el agua. Ensimismada en su rito se sorprendió cuando una gran ola la empapó por completo,…. estalló en carcajadas. Su vestido estaba totalmente pegado a su piel...las gotas de agua salían despedidas de su pelo formando un gran círculo que reproducía el torbellino de su giro. Perdió el equilibrio y cayó en la orilla. Su mano derecha se aferró al cordón de su cristal mágico, la izquierda la llevó a su corazón como intentando apaciguar su ritmo. Cerró los ojos, el sol la cegaba.
-¿Puedo ayudarte? –oye a una sombra.
Se incorpora, poniendo una mano a modo de visera sobre su frente tratando de enfocar su visión a contraluz.
-Si claro, siempre viene bien una ayuda –contesta ella.
-¡Vaya caída más tonta!.
-Si, me suele pasar, siempre acabo igual, intento no mojarme para “limpiar” mi cuarzo...pero el mar es empeña en limpiarme entera –explica ella sonriendo.
-No te preocupes, te presto mi camiseta y ya me la devolverás.
-¿Lo harías?...te quedarás helado.
-Por supuesto, que menos por una chica tan preciosa.
Ella coge los extremos de su vestido, cruzando los brazos que lentamente van ascendiendo por los contornos de su cuerpo. La mirada del chico de ojos pardos se fija en el borde de la camisa. Había visto miles de cuerpos desnudos pero ese se le antojaba diferente, no podía apartar la vista de esa piel. La camisa, mojada, complicaba su paso mas allá de los hombros. La ayudó a sacarla por encima de su cabeza, apenas rozándola, en un esfuerzo por no parecer atrevido.
Frente a frente, sus miradas se encuentran y saltan chispas....Las gotas caen desde su flequillo a su rostro y dibujan pequeños arcoíris en sus mejillas; todo a su alrededor se difumina...incluso los chillidos de los niños jugando con las cometas se han amortiguado...parecen lejanos.
Una gota se desliza hacia los labios de la chica de la camisa blancacasitransparente y su lengua la captura con avidez. Una atracción irreprimible se apodera de él. Acerca sus labios para ser bebido como esa gota.
La marea esta subiendo. Una ola les hace salir del embebecimiento. Ríen al unísono, calados.
-Está el mar juguetón hoy-dice ella ajustando su colgante al cuello.
El cristal se balancea entre las lunas de su pecho.
Se hace un gran silencio solo salpicado por una melodía de Antonio Vega
“Donde nos llevó la imaginación
De sol, espiga y deseo
-¿La conoces? - pregunta ella.
El chico de ojos pardos no contesta, parece hipnotizado por el cristal entre las lunas de su pecho. Ella repite:
-¿Conoces esa canción?
-¿Cómo?.... ¿Que canción?
-Estabas lejos -añade ella riendo.
-¿Donde te fuiste?
-Me perdí hace un rato entre las gotas de tus labios.
Ante su respuesta se muerde suavemente su labio inferior. Siempre lo hace cuando se siente sensualmente viva y a continuación, vuelve a humedecer sus labios con la punta de su lengua y continúa
-Te decía que si conoces la canción de Antonio Vega...el sitio de mi recreo, creo que es el titulo.
-Si me suena...
-Es preciosa, verdad. Un temazo de esos que pasarán a la historia.
-Sinceramente no me acuerdo ahora la melodía. ¿Me la tarareas?
Ella comienza a cantarla con voz suave:
“De sol, espiga y deseo
-Ahora pasará a formar parte de "mi historia" -interrumpe ella. Sonaba cuando estábamos los dos hechizados; me hará recordar siempre este momento y esos ojos pardos que han entrado sin llamar. ¿Como te llamas "chico de ojos pardos"?
No le deja responder. Sus manos cogen el rostro del chico de ojos pardos. La luna ilumina sus cuerpos desnudos que se dan calor. Él distancia ligeramente el rostro, quiere ver su cara con claridad bajo esa luz lunada. Le dice casi en un susurro
-Eres preciosa.
jueves, 12 de febrero de 2009
LA ISLA
El cielo azul inmenso.
El mar.
Blancas arenas entre mis dedos.
El mar.
Un beso azul
busca en tus labios
la blanca huella
de tu lengua.
Una lluvia de estrellas
recorre mi cuerpo;
la misma que despide
tu impenetrable mirada.
Tu,
que todo lo amas
con las manos,
te pierdes
en el alma de lluvia de la luna.
El cielo azul,
la blanca arena,
y el mar.
Moon
viernes, 23 de enero de 2009
LA LUNA
La luna se puede tomar a cucharadas
o como una cápsula cada dos horas.
Es buena como hipnótico y sedante
y también alivia
a los que se han intoxicado de filosofía.
Un pedazo de luna en el bolsillo
es mejor amuleto que la pata de conejo:
sirve para encontrar a quien se ama,
para ser rico sin que lo sepa nadie
y para alejar a los médicos y las clínicas.
Se puede dar de postre a los niños
cuando no se han dormido,
y unas gotas de luna en los ojos de los ancianos
ayudan a bien morir.
Pon una hoja tierna de la luna
debajo de tu almohada
y mirarás lo que quieras ver.
Lleva siempre un frasquito del aire de la luna
para cuando te ahogues,
y dale la llave de la luna
a los presos y a los desencantados.
Para los condenados a muerte
y para los condenados a vida
no hay mejor estimulante que la luna
en dosis precisas y controladas.
Jaime Sabines